¿Perros con sobrepeso? Pues sí, pasa más de lo que te imaginas. Y si el tuyo está empezando a coger barriguilla o ya va rodando más que caminando, toca ponerse las pilas (con cariño, ¿eh?).
No se trata de obsesionarse, pero sí de entender que ese “está un poco gordito” puede traerle problemas si no lo controlas a tiempo.
A veces engordan porque comen de más, otras porque se mueven poco, o porque simplemente no hemos ajustado su rutina a su ritmo de vida.
¡Pero lo bueno es que esto tiene solución!
Hoy desde Corralet te cuento cómo ayudar a tu perro a perder peso sin hacerle pasar hambre ni convertir tu casa en un gimnasio canino.
Perros con sobrepeso: señales, causas y solución
Los perros con sobrepeso no siempre tienen pinta de estar gordos. A veces te parece que solo están “rechonchitos”, “fuertes” o que “comen bien”, y mientras tanto su salud se va cargando sin que tú te des cuenta.
Lo que empieza con un poco de pan de más, unos premios aquí y allá o paseos cortos porque hace frío… acaba en un perro que no se mueve, respira mal o tiene dolor de articulaciones.
Y sí, esto es más común de lo que crees, sobre todo en perros pequeños, tranquilos o caseros.
Pero la buena noticia es que se puede detectar y corregir a tiempo.
Vamos al grano para que sepas si tu perro necesita bajar peso, por qué puede estar en ese punto y qué puedes hacer desde ya.
¿Mi perro está gordito o está bien? Aprende a diferenciarlo
No hace falta llevarlo al veterinario para darte cuenta de que tu perro tiene unos kilos de más.
Si lo miras desde arriba y no ves cintura marcada, o si al tocarle no notas fácilmente las costillas, es muy probable que tengas un perro con sobrepeso.
Otra señal: si antes subía al sofá de un salto y ahora se lo piensa tres veces o necesita ayuda.
O si jadea con paseos cortos, duerme más de la cuenta o ha perdido interés por jugar. Son pistas claras de que algo ha cambiado y no es solo la edad.
El problema es que normalizamos el sobrepeso porque “le sienta bien la comida” o “tiene buen saque”, pero eso no vale como excusa.
Aunque esté feliz y con energía, el exceso de peso afecta a sus órganos, sus articulaciones y su calidad de vida.
Y ojo: en razas pequeñas o mini, esos kilos de más se notan antes.
Por eso, si tienes un perro mini con tendencia a engordar, es todavía más importante que estés pendiente.

Tablas práctica para detectar perros con sobrepeso por tamaño o raza
Aquí te dejo una tabla rápida para que tengas una referencia aproximada sobre los perros con sobrepeso según la raza.
Obviamente, cada peludo es un mundo, pero esto te da una base clara para saber si tu compi se está pasando de rosca:
Raza (Mini) | Peso ideal aprox. | Sobrepeso a partir de |
---|---|---|
Chihuahua | 1,5 – 3 kg | +3,5 kg |
Yorkshire Terrier | 2 – 3,2 kg | +3,8 kg |
Pomerania | 1,8 – 3,5 kg | +4 kg |
Bichón Maltés | 3 – 4 kg | +4,5 kg |
Caniche Toy | 2,5 – 3,5 kg | +4 kg |
Shih Tzu | 4 – 7,2 kg | +8 kg |
Pug (Carlino) | 6 – 8 kg | +9 kg |
Teckel mini (Salchicha) | 3,5 – 5 kg | +5,5 kg |
Papillón | 3 – 4,5 kg | +5 kg |
Cavalier King Charles | 5,5 – 8 kg | +9 kg |
Raza (Grande) | Peso ideal aprox. | Sobrepeso a partir de |
---|---|---|
Labrador Retriever | 25 – 32 kg | +34 kg |
Golden Retriever | 27 – 34 kg | +36 kg |
Pastor Alemán | 30 – 40 kg | +42 kg |
Boxer | 25 – 32 kg | +34 kg |
Dóberman | 30 – 40 kg | +42 kg |
Rottweiler | 35 – 50 kg | +52 kg |
Akita Inu | 30 – 45 kg | +47 kg |
Braco Alemán | 25 – 32 kg | +34 kg |
Husky Siberiano | 20 – 27 kg | +29 kg |
Dálmata | 23 – 30 kg | +32 kg |

Principales motivos por los que un perro engorda
Aquí no hay misterio: si tu perro está ganando peso, está comiendo más de lo que gasta. Así de claro.
Los perros con sobrepeso tienen a tener una rutina marcada por estos aspectos:
- Premios todo el rato. Entre la galletita del desayuno, el trocito de queso al mediodía y los restos de cena, te estás pasando sin darte cuenta.
- Poco movimiento. Si tu perro vive dentro de casa, sale a pasear 10 minutos y pasa el resto del día tumbado, no va a quemar lo que come.
- Raciones mal ajustadas. Muchos piensos vienen con recomendaciones generales, pero no se adaptan al nivel de actividad real de tu perro.
- Esterilización sin cambio de dieta. Después de castrar, bajan el ritmo. Si no ajustas la comida, el peso sube.
- Edad. A partir de los 6-7 años, el metabolismo cambia y tienden a moverse menos.
- Genética y carácter. Hay perros que son tranquilos por naturaleza. Eso no es malo, pero sí requiere más control con la comida.
Y si encima tienes un perro mini de interior, la ecuación es peligrosa: comen poco, se mueven poco, y si no lo vigilas, te plantas con un peludo gordito antes de que te enteres.

Razas más propensas al sobrepeso
No todos los perros engordan con la misma facilidad. Hay razas que, por su metabolismo, estructura corporal o nivel de actividad natural, necesitan menos comida de lo que la gente cree.
Aquí van algunas que tienden a redondearse si no llevas cuidado:
- Bulldog francés y bulldog inglés
- Beagle
- Labrador y golden retriever
- Cocker spaniel
- Pug (carlinos)
- Teckel (salchicha)
- Chihuahua y pomerania, si les das más premios de la cuenta
- Perros mestizos mini o toy, especialmente si viven en piso
Si tienes alguna de estas razas y tu perro ya está en el lado “rellenito”, toca ajustar.
Porque en estos casos, no es solo estética: los perros con sobrepeso de estas razas sufren más problemas respiratorios, articulares y digestivos.
Dieta para perros mini con sobrepeso
Cuando hablamos de perros mini con sobrepeso, hay que afinar todavía más.
En un perro pequeño, 300 gramos de más ya pueden suponer un problema serio. Y aquí no vale con ponerle pienso “light” y listo. Hay que entender qué le estás dando, cuándo, cuánto y si lo necesita de verdad.
El objetivo no es que pase hambre, ni que te mire con cara de pena mientras tú cenas.
Se trata de ajustar lo justo para que empiece a perder peso poco a poco y sin que sufra ni él ni tú.
Y sí, hay cosas que seguramente estás haciendo sin darte cuenta y que están boicoteando todos tus intentos de ponerlo en forma.
Si de verdad quieres ayudar con la dieta, hay que conocer bien qué necesita un perro pequeño que está dentro del grupo de perros con sobrepeso.

Qué alimentos evitar para que un perro no engorde (y no solo pienso)
Vale, ya tienes claro que tu perro está un poco rechonchito.
Primer paso: quitar lo que le está sobrando. Y aquí no te hablo solo del pienso.
Muchas veces los extras del día a día son los que más influyen, sobre todo si tienes un perro pequeño.
Aquí van los clásicos que tienes que cortar (o reducir muchísimo):
❌ Premios industriales todo el rato.
Si le das galletas cada vez que se sienta o respira, estás sumando calorías sin control.
✅ Busca snacks bajos en grasa o usa un trocito de su propio pienso como premio.
❌ Sobras de tu comida.
Queso, pan, trozos de embutido, salsas… todo eso le gusta, sí, pero es un chute de grasa y sal que su cuerpo no necesita.
❌ Snacks “saludables” que no lo son.
Hay barritas y snacks que se venden como sanos pero son puro azúcar para perros.
✅ Revisa etiquetas y busca ingredientes simples y naturales.
❌ Fruta a lo loco.
Un trocito de manzana o plátano vale, pero media pieza al día no es buena idea.
✅ Mejor en pequeñas cantidades y frutas con menos azúcar.
❌ Pienso a demanda.
Eso de que tenga el cuenco lleno todo el día puede estar saboteando cualquier intento de dieta.
✅ Marca horarios fijos y controla la cantidad exacta.
Este tipo de errores es muy común en los perros con sobrepeso, sobre todo en razas pequeñas, donde cualquier exceso pesa más.
¿Consejo? Apunta todo lo que come tu perro durante un día completo.
No solo las comidas, también lo que “pilla por el camino”. ¡Te vas a sorprender!
Cómo ajustar las raciones sin que se quede con hambre
No debes quitarle comida a lo bruto, pero sí realizar ajustes.
Si tu perro tiene hambre todo el día, se va a estresar, va a estar más nervioso, y encima puede acabar engordando más por ansiedad o por falta de saciedad.
Lo que sí puedes hacer es esto:
- Reduce las raciones poco a poco. Si come 100g al día, baja a 90 durante una semana, luego a 80. Su cuerpo se adapta mejor.
- Divide la comida en más tomas. En vez de 1 o 2, reparte en 3 o 4 pequeñas. Así tiene la sensación de que come más veces.
- Añade verdura cocida sin sal (como calabacín o judía verde). No suma muchas calorías y llena más el estómago.
- Pásalo a un pienso bajo en grasas y alto en fibra. Ayuda a que se sienta saciado sin comer tanto.
- Pésale la ración, no te fíes del ojo. Lo que para ti es “un puñadito” puede ser el doble de lo que necesita.
Todo esto te va a ayudar si estás lidiando con perros con sobrepeso que comen con ansiedad o que ya están acostumbrados a comer más de la cuenta.
Y muy importante: si alguien más le da comida (familia, niños, vecinos…), ¡que se entere del plan! Porque da igual lo bien que lo hagas tú si luego le cuelan jamón cuando no miras. 😄
Menús caseros vs. alimentación comercial: pros y contras
Hay quien quiere preparar la comida en casa y quien prefiere tirar de pienso o comida húmeda.
Ninguna opción es mejor que la otra si se hace bien.
Lo importante es que no improvises ni vayas a ciegas.
Menús caseros – Pros:
- Sabes exactamente qué está comiendo.
- Puedes controlar mejor las cantidades.
- Ideal si tiene intolerancias o problemas digestivos.
Menús caseros – Contras:
- Requiere planificación y tiempo.
- Si no están bien equilibrados, pueden faltar nutrientes.
- Necesitas orientación (con un veterinario o nutricionista canino).
Comida comercial de calidad – Pros:
- Viene con los nutrientes ya calculados.
- Hay opciones específicas para perros con sobrepeso.
- Más práctico y fácil de organizar.
Comida comercial – Contras:
- No todo lo “light” es bueno. Hay que leer etiquetas.
- Puede incluir ingredientes poco nutritivos si es de baja calidad.
En resumen: elige el tipo de dieta que te funcione a ti y a tu perro, pero hazlo bien.
Y si dudas, consulta con un profesional en nutrición canina.
Y es que los perros con sobrepeso no necesitan milagros, solo coherencia, regularidad y un poco de control en el día a día.
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